Se inicio contra toda lógica de programación. Impulsado por la vida.
Tuvo intensidad pero evitó lo establecido. Un pacto conjunto de disponer de nuestro propio tiempo. Eso de saber esperar. Dolor inasible y pasajero. Placer bajo la gravidez del vientre. Estar abiertas a nuestra química. Seguridad del gesto intuitivo.
La ví y la felicidad vino con sus ojos.
viernes, junio 15, 2007
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